¿Te cuesta mucho ser romántico? ¿Necesitas
mejorar tu seducción? ¿Quieres que tu pareja se sienta la mujer más afortunada
del mundo por estar a tu lado?
¿Estás enamorado de alguien pero no sabes qué
hacer para conquistarla?
Pues estas en el lugar adecuado.
Dicen que la teoría es algo muy importante
a la hora de aprender o de mejorar cada día pero que no hay nada mejor que la
práctica y la experiencia y desde ahí es donde pretendo ayudarte.
¿Qué pretendo con este blog? Ante todo
ayudar a todos aquellos hombres que necesitan ser románticos sin serlo por
naturaleza, a todos aquellos hombres que necesitan el romanticismo y la
seducción para mejorar notablemente sus relaciones o su vida sentimental e
incluso sexual cuando el romanticismo jamás ha formado parte de sus vidas,
siempre desde el respeto a la mujer y de una forma honesta madura y
consecuente.
Todos sabemos que a la mayoría de los
hombres nos cuesta ser románticos, es algo que a veces parece que va en contra
de nuestra hombría por el hecho de que relacionamos el ser sentimentales y
sensibles con ser "menos hombres" y eso es algo que cada día está
cambiando y está haciendo que muchos de nosotros nos quedemos fuera de juego.
El "macho ibérico" se está
extinguiendo y no hay nada que más atraiga a una mujer que un hombre que la
ofrezca seguridad, transparencia, que no tenga miedo a mostrar sus sentimientos
tal y como son y a tener un millón de detalles con ellas, hacerlas sentir como
auténticas reinas, ser sus compañeros, sus amigos, sus amantes prohibidos, no
renuncian a nada pero si tu pudieras ¿renunciarías?
Las mujeres cada día necesitan más, no se
conforman con cualquier cosa, están cansadas de falsas promesas, falsos mitos
eróticos que se quedan en eso, en mitos, buscan autenticidad, que si tiene que
ser algo esporádico que lo sea pero sin mentiras, alguien que se moleste en tener detalles con ellas, alguien que ellas noten que no piensa solo en la cama y que
se molesta en el bienestar la mujer con la que está, con la verdad siempre por
delante.
Eso es lo que nos puede convertir en
diferentes, en lo que de verdad puede resultar atractivo en un mundo en el que
la sociedad crea personas cortadas por el mismo patrón y si queremos hacerlas
felices o que caigan rendidas en nuestros brazos debemos esforzarnos para
ello.
Yo solo intento ayudarte desde el respeto
máximo a la mujer para ponerte las cosas un poquito más fáciles y que no tengas
que echar humo por la cabeza pensando qué puedes hacer para convertir un día de
rutina en algo muy especial, cómo sacarle una de sus más bellas sonrisas, cómo
hacer que te vea como el chico diferente que de verdad merece la pena conocer o
conservar y no como un devorador de mujeres, una pareja desastre, aburrida y
monótona o alguien que ni siquiera merece la pena conocer.
Para ello me baso en mis propias
experiencias, recuerdo que mi madre muy de pequeño me dijo una vez "A las
mujeres hay que quererlas y respetarlas siempre" y ha sido algo que se me
quedó ese día grabado en la mente y que jamás se me ha logrado borrar. Podría
decir que a lo largo de mi vida he tenido muchísima suerte en el amor, también
he cometido muchísimos errores y actualmente sigo teniendo esa suerte, quizá
muchísimo más que nunca, al lado de la persona más increíble que he conocido
jamás, pero hasta esta parada de mi viaje puedo decir que anteriormente he
conocido grandísimas mujeres con las que he compartido preciosas experiencias
siempre, manteniendo con la mayoría de ellas una bonita amistad en la
actualidad.
Todas estas experiencias en mi vida y todo
lo que he aprendido de ellas es lo que pretendo compartir en este blog, y lo
que pretendo utilizar para ayudaros en todo lo que me sea posible siempre desde
el respeto, los valores y la integridad, ya que son el camino que me ha llevado
hasta ahora a vivir y disfrutar todo lo que he vivido hasta el momento,
viviendo día tras día otras aún muchísimo mejores en la actualidad.
El romanticismo, la seducción, la pasión,
el erotismo son sensaciones increíbles para el hombre pero de un modo honesto,
consecuente y respetuoso pueden llegar a serlo también para una mujer.
¿Me acompañas? ¿En qué puedo ayudarte?
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